Los vallecanos salvaron un punto en el último minuto tras empatar en casa ante el Gimnástic (1-1), en un encuentro que a los vallecanos se les complicó demasiado y que terminó con diez jugadores en el campo por parte de cada equipo.
El Rayo defendía liderato ante el Nàstic y la duda era si acogerse a la Ley Concursal esta semana iba a afectar al conjunto madrileño. En el minuto 38, la duda se convirtió en certeza con el gol de Powel a favor de los tarraconenses, que remató de cabeza un saque de falta lanzado por Morán.
Poco después, Sergio Díaz tocaba con la mano en el área, y el colegiado señalaba penalti a favor del Rayo. Pero Armenteros desperdició la oportunidad de empatar, ya que Rubén adivinó la trayectoria y detuvo el lanzamiento.
Poco después, Sergio Díaz tocaba con la mano en el área, y el colegiado señalaba penalti a favor del Rayo. Pero Armenteros desperdició la oportunidad de empatar, ya que Rubén adivinó la trayectoria y detuvo el lanzamiento.
Tras el descanso, el Rayo no se rindió y aprovechó la lesión de Powel para asediar la portería del Nástic. No obstante, los catalanes tuvieron el segundo en las botas de Gerardo, que envió un disparo al travesaño.
Al Rayo se le presentó entonces otro factor a favor para hacerse con el juego, gracias a la expulsión de Sergio Díaz, que vio su segunda amarilla por una patada sobre Piti. Pero el colegiado igualó las fuerzas, con una roja directa a Aganzo, que realizó una fuerte entrada por detrás a Fuster en el centro del campo.
Parecía que al Rayo se le escapaban los tres puntos cuando Piti, a un minuto para el final, batió por la izquierda a Rubén y amarró un empate que, sin embargo, le apea de la primera posición de la tabla.
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